Sesión VI:

Como las sesiones con los otros pacientes habían quedado canceladas, el lunes completo lo pasé en casa, re descubriendo todo lo que había pasado por alto.

La decoración...los aromas...la presencia de ella que se hacía más elocuente porque no estaba allí.
( Otra vez se había ido sin decirme nada ).

Tomaría algún tiempo para que ella entendiera lo que había sucedido durante el fin de semana que comenzó en una noche de viernes que se alargó hasta el lunes en la mañana…

A mi también me tomaría algo de tiempo entenderlo. Por lo menos hasta que la luna fuera llena,

Pero ahora había llegado el momento de ir al consultorio.

Esta vez, todo era tan diferente …

En realidad estaba ansioso de llegar y de platicar con él. Y es que había tanto que platicar …

Llegué un poco antes de la hora, lo cuál me dio tiempo para tomar nueva posesión de mi consultorio … mi consultorio.

Entró sin hacer ruido, y sólo me di cuenta de que estaba dentro cuando terminé de arreglar los papeles sobre mi escritorio.

Y aunque lo estaba esperando, una vez más me había sorprendido …

No habló. Simplemente se me quedó viendo con una pequeña sonrisa entre interrogante y cómplice.

Sin perder le calma me senté en mi sillón y lo miré de frente mientras lo invitaba a que se sentara.

Se quedó de pie un instante, fijando su mirada penetrante en mi. Y lentamente se sentó una vez más frente a mi.

–“¿ Quién es usted ? ”

Le pregunté.

–“ Pensé que ya lo habría descubierto doctor. ”

–“ No estoy realmente seguro. ”      

Silencio.

–“ Tal vez la pregunta es quién es usted, doctor. ”

( Si, esa es una buena pregunta … ¿ Quién soy yo ? )

Silencio.

–“ Doctor:
       ¿ Alguna vez ha perdido a alguien que haya usted amado intensamente ?

       Es decir;
       perdido en un sentido final, sin posibilidad de recuperarla…

      

       Vamos, para empezar : 

       ¿ Alguna vez ha estado usted locamente enamorado ?
       Porque de no ser así, usted no podría entender lo que es perder a alguien… 

       Yo no puedo tener una relación duradera.

       Para mí el amor y la amistad son pasajeros… pero hasta ahora he creído que eso 

       se debe a mi naturaleza… inmortal.
       Si usted supiera las veces que me he enamorado y he perdido a esa mujer

       amada, sin posibilidades de recuperarla…   

       Pero no, claro, usted no puede saber eso porque usted no es inmortal… y 

       tampoco creo que haya estado realmente
       enamorado… ”

( ¡ Elianna ! )

Su boca era de fuego dulce, su cuerpo se derretía y vibraba bajo el mío, sus gritos y sus sollozos me excitaban hasta el punto del llanto…

¡Nunca había sido así! Ni en mis más descontroladas fantasías.

Pero no era fantasía, era ella, la misma de siempre y sin embargo otra… ¿ O era yo el que era diferente ?

Exploraba su cuerpo como si fuera la primera vez que estaba con una mujer, con una curiosidad y un deseo ardiente.

¡ Y la reacción de ella me hacía desear complacer más y más… !

Y al día siguiente ella ya no estaba, sólo había una nota :

“ Necesito tiempo, esto está un poco fuera de mi control y no sé que nos pasa. O que te 

   pasa  a ti… o a mi… no sé, y espero que por lo menos tú si sepas… ”

Elianna.

¡  Que confusión !

Ahora no sabía si estaba perdiendo algo de lo que me estaba por primera vez percatando.

  ¡ Si !

Me estaba enamorando y la estaba perdiendo… ¡ Y no sabía como arreglarlo!

Y como un eco que venía desde lo más profundo de mi ser alcancé a escuchar su voz:

–“ Lo único que no tiene arreglo posible es la muerte doctor…

     …la muerte. ”

   Y sin poder contenerme, comencé a llorar.

   Y me quedé dormido, profundamente,
   soñado con Elianna,
   soñando con volar …